Oregon, EEUU, 16 de diciembre de 2015.
Ajustador del Pensamiento.
Tema: “Acerca de la segunda milla.”

Mensaje recibido por Anyas.

“Al ganar almas para el Maestro, no es la primera milla de compulsión, deber o convención la que transformará al hombre y a este mundo, sino más bien la segunda milla de servicio libre y devoción amante de la libertad… [LU 2084: 05]

Ajustador del Pensamiento: “Querido hijo, la cita anterior resuena contigo pues te identificas con haber corrido la primera milla desde hace mucho tiempo en tu experiencia de vida. También has probado lo que se siente correr la segunda milla, al estar motivado por el amor y no por un sentido del deber.

“Cada viaje individual comienza en su propio momento, pero cada uno debe empezar en alguna parte. Es parte del proceso correr la primera milla e iniciar el viaje espiritual por un sentido del deber u obligación. A veces, su aparición está motivada por sentimientos de miedo, culpa o vergüenza. Obviamente, estos no son los motivantes que el Padre desea que experimenten sus hijos. Sin embargo, estos motivantes ayudan a muchos a salir de su letargo espiritual. Eventualmente, al finalizar la carrera de desafiantes obstáculos de la primera milla, habrán desarrollado una mayor capacidad pulmonar y resistencia espiritual. Esto traerá resultados positivos para la expansión del sistema cardio-espiritual –la apertura del corazón al Amor.

“Como en cualquier carrera, la primera milla tal vez sea muy difícil y muchos sientan el deseo de rendirse. Sin embargo, al perseverar más allá de la incomodidad inicial, el corredor tendrá su segundo aire y comenzará a correr con mayor comodidad después de superar la marca de la primera milla.

“La primer milla se encuentra allí como una iniciación para la segunda milla. Es el primer paso necesario que impulsa al alma hacia una mayor libertad y un verdadero servicio amoroso.

“Has experimentado en tu propia vida el contraste entre servir a Dios por un sentido del deber mezclado con el temor de no ser lo suficientemente bueno, y servir a Dios y a tus hermanos por amor y aprecio. Una vez que alcanzas la segunda milla, la alegría empieza a llenar tu corazón y transforma toda la experiencia. El servicio se torna agradable y es una validación de que estás progresando en el camino correcto.

“Los corredores de la segunda milla son aquellos que están transformando el mundo, pues activan la fuerza transformadora del Amor en Acción. Los corredores de la primera milla ponen un pie delante del otro por un sentido del deber aún impregnado de resistencia interior a medida que atraviesan una zona incómoda. Los corredores de la segunda milla superan muchas barreras internas y emergen en una zona más agradable. Están ‘en la zona’, la Zona del Amor.

“¿Acaso no vale la pena soportar el dolor y el sufrimiento de la primera milla, para probar la dulzura del cambio que ocurre a lo largo de este proceso? La primera milla es cuando declaras tu intención de llegar a la meta. El Padre puede probar la autenticidad de tus intenciones antes de recompensarte con los preciosos frutos del Espíritu. Estos frutos solo pueden madurar cuando se nutren del Amor, y no de un mero sentido del deber.

“Un servicio gozoso ya no se sentirá como una obligación. Se sentirá como una recompensa y te animará a servir cada vez más, conforme seas testigo de la manifestación del amor al compartirlo libremente.”

Traducido por Perla Téllez Garza.

© Grupo de Progreso 11:11.
No importa cual sea la pregunta, la respuesta siempre es el Amor.

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