La Verdadera Reciprocidad Entre Estudiante y Maestro.
Un Ajustador del Pensamiento Habla—139—12 de Diciembre, 2003.

Querido mío, con el tiempo tus habilidades de escuchar mejorarán, y de esa forma sabrás sin duda alguna que, si, esta Calmada Pequeña Voz dentro de ti también puede escucharse sobre el alboroto del mundo, pero eso solamente ocurre cuando afinas tus oídos a Mi llamado.

El punto es de que en cualquier momento que buscas Mi Presencia en la Calma, estas muy ligeramente afinado a esa habilidad de escuchar el distante eco del Cielo.

Hay un esfuerzo envuelto de tu parte, porque hay muchas distracciones que claman por tu atención y te inducen a alejarte de Mí.

El único momento que puedo llegar a ti es cuando Me prestas toda tu atención y cuando no dejas que nada se entrometa en las formas de tu pensamiento.

Lo mejor que hay que hacer es prepararte tu mismo para que nada del mundo exterior pueda perturbarte.  Por supuesto, hay ruidos normales de la vida diaria, pero puedes aprender eso, por medio de la intención de la voluntad en visualizar un ‘escudo’ a todo tu alrededor, para poder sentarte en ‘espacio privado’, por decirlo así.

Lo próximo que hay que hacer es devotamente pedir Mi Asistencia.  Eso ayuda a moldear tu actitud hacia Mí.

Siguiente, tienes que ser sincero y verdadero en querer tener una comunicación Conmigo, porque entonces realmente has entrado reverentemente dentro de santidad de las Santidades, y por esa razón estás en suelo sagrado.

Amado mío, tu diligencia en Buscarme al mismo tiempo cada día, significa para Mi que has tomado en serio tu deseo de estar Conmigo y me demuestra que Me consideras ser digno de tu amor y atención.

Y eso, Mi niño, es la verdadera reciprocidad entre un estudiante y un Maestro.

Traducido por Loyda Mira.
© Grupo de Progreso 11:11.
Perdiéndote a ti mismo, Me ganarás – AP.