Transmisión de un Ajustador del Pensamiento – 6 de octubre, 2004.
Hablemos sobre la preparación porque se necesita hacer mucho trabajo preliminar para preparar a los ciudadanos de este mundo en una cooperación mucho mas grande hacia la paz. La paz vendrá en una persona a la vez, y ocurrirá cuando abundante urgencia infantil de tener la razón sea menor. Hay una actitud de muchos prejuicios en los corazones de muchas personas, todos con una actitud de siempre ser mejor que los demás. Lo mismo se aplica a los rencores y a los resentimientos sobre penas pasadas y las palabras dichas durante un enojo.
Para que otro Hijo de Dios aparezca sobre el planeta, se necesita mucha preparación en la ‘tierra’ para cultivar paciencia y perdón y sobre todo la aceptación de las faltas y defectos de otros. Nadie es perfecto, pero, es tan infantil echarse la culpa los unos a los otros por errores percibidos. Solamente el Creador Universal ve el principio y el final y por lo tanto conoce toda intención en el corazón de cada uno, en todas las miríadas de criaturas, en todas las miríadas de planetas.
Imaginemos por un momento que Jesús regresara a caminar entre ustedes en forma visible, ¿Cuál sería la reacción de ustedes? ¿Lo reconocerían? ¿Lo aceptarían? ¿Le reclamarían? ¿Entenderían mejor Sus palabras? O ¿lo crucificarían nuevamente, porque no estaban de acuerdo con Sus mensajes de que todas las personas son igualmente amadas y son hijos de un solo Dios? Es necesario meditar sobre esas cosas y cuál sería tu reacción al finalmente comprender que un eterno Dios omnipotente y omnisciente nunca ordenaría a un Hijo-Creador ser crucificado en un pequeño e insignificante planeta en el espacio por los pecados de sus habitantes. Realmente ahora, despierta a esos entendimientos mas grandes que nunca deberían de haber sido, que fueron y que todavía son, conceptos erróneos mantenidos hoy en día; de que tal sacrificio era requerido. Enfáticamente, NO, la humanidad será responsable por sus propios pensamientos, palabras y obras. Cada uno se juzgará así mismo, ahora y en la eternidad.
Todas estas lecciones, de hecho, pueden ser usadas como directrices – y servir como preparación de la tierra para la venidera edad espiritual – ya que son traídas para cada hombre, mujer y niño en una forma simple de entender. De hecho, estas lecciones deben ser enseñadas tan pronto los niños puedan entender, los padres realicen finalmente lo sagrado que es el trabajo de ser padres y que no es algo que debe tomarse a la ligera. Los niños son el futuro del planeta. Entonces, no se gana nada con consentirlos y ceder en todos sus caprichos y entrenarlos a una gratificación instantánea. En vez de eso enséñenles a amar y aceptarse los unos a los otros. Sean sus principales ejemplos. Eviten juzgar y chismear porque esos son destructores de la confianza. Prepárense ustedes mismos y labren la tierra de sus propios corazones para un mayor entendimiento de la verdad, belleza y bondad. Luego, muchas mas cosas pueden ser reveladas a ti en preparación para la venidera edad espiritual, cuyo principio ya está sobre todos ustedes.
Has encendido una Luz y es Luz se convertirá
en un Fuego Deslumbrante—ABC-22.