Permíteme Hablar Por Ti

Oakland, California, EU de A, 10 de Febrero, 2008.
Divino Padre (Cristo Miguel).
Tema: “Permíteme Hablar Por Ti.”

Recibido por Donna D’Ingillo.

Divino Padre: “Mis hijos, tu Padre Miguel los saluda.  Yo los llamo al servicio sagrado de ayudar a tus hermanos y hermanas en sus divinas herencias.  A pesar de que ustedes no son responsables por sus despertares, Yo los animo a que les ayuden a crecer dentro de una nueva auto-consciencia con una compasión amorosa a sus estados.  Amen a sus hermanos y hermanas exactamente en donde están, que ellos también, están en sus recorridos.  Quizás no estén tan avanzados como ustedes lo están; sin embargo, ellos están buscando y están en sus propios caminos.

“Uno de los aspectos mas exigentes acerca del servicio es encontrar a los individuos a quien tú deseas servir donde él o ella estén.  No tienes por qué preocuparte acerca de las palabras que digas.  Déjame hablar por ti. Pósate en el centro de tu corazón y mantén la intención y tu deseo de que Mis palabras resuenen dentro de sus almas.  Mientras mas te puedas enfocar en eso, mas podrás relajarte y dejar que Yo guíe a la persona que está ante ti.  De esa forma, permites que la presión que te has puesto a ti mismo al estar en servicio sea liberada, dejando que Mis palabras haga eco en sus corazones.

“Siguiendo este ejemplo, el servicio se vuelve mas fácil y mas inspirado.  Aprendes mas a conectarte Conmigo y a través de tu Madre.  Aprendes a cómo escuchar con tu corazón al recorrido de otra persona, dándoles validez.  Provees un espacio seguro para ellos en que confíen en ti al tú enfocarte en sus necesidades.  Sientes la energía que se mueve al conectarlos; forjas un verdadero vínculo.  Sus efectos en tu cuerpo son placenteros y de sanación.

“Mis hijos, ¡si solamente pudieran sentir una dosis del bien que ustedes hacen cuando se permiten a ustedes mismos estar disponibles para servir, pasarían sirviendo el día entero!  Vuélvanse mas conscientes de las oportunidades que se les presentan.  ¡Abran sus corazones al deseo de servir para Mi, para tu Madre y para el universo y déjennos sorprenderlos con nuevos hermanos y hermanas para amar!”