Alabama, EU de A, 31 de enero, 2014.
Maestro: Ajustador del Pensamiento.
Tema: “Tu propósito de vida”
Mensaje recibido por Oscar.
Ajustador del Pensamiento: “Todo lo que viene del padre posee su misma naturaleza. Los seres humanos son creaciones del Padre y por lo tanto contienen en su personalidad el germen de la esencia divina que ellos pueden desarrollar hasta alcanzar la semejanza con Dios, con la ayuda del Maestro Interno – el fragmento de Dios – enviado para residir en el alma del hombre.
Cuando los seres humanos se preguntan acerca del propósito de sus vidas sus ideas son influenciadas por las ideas materialistas del mundo. Por eso es tan prevalente en esta época el deseo de ser ‘grandes’ hombres y mujeres a los ojos de la humanidad, mientras se le da muy poca consideración al hecho de ser alguien útil para la civilización y la creación. La grandeza de la personalidad no es algo que se alcanza a través de las acciones o de grandes hazañas. La verdadera grandeza espiritual se fundamenta en el hecho del grado en que una persona ha alineado su voluntad con la voluntad divina.
Quienes quieran expresar su propósito en la vida – el propósito para el cual han venido a experimentar esta vida material – deberían enfocarse en las tareas que el Padre ha puesto en sus manos. Los propósitos del Padre son expresiones de su naturaleza, por lo tanto, cualquier cosa que hagamos en el mundo para satisfacer nuestro anhelo profundo de saber cuál es nuestro papel en la gran obra de la creación, debe también expresar la naturaleza divina.
Todas las acciones destinadas para nuestro propio engrandecimiento y para alimentar nuestro ego son una pérdida de tiempo, porque están muy lejos de la naturaleza del Padre. El Creador no llama la atención acerca de si mismo ni exige cultos o alabanzas. Al Padre lo adoramos simplemente por lo que es, un Padre que nos ama sin condiciones y que siempre nos da lo mejor de sí mismo. El amor de los que conocen al Padre surge espontáneamente al percibir la bondad de su naturaleza. Esta naturaleza es la que naturalmente se manifiesta en nosotros a medida que crecemos espiritualmente.
Tu propósito debe reflejar las intenciones y acciones del Padre, siendo siempre expresiones de amor. Esto siempre implica el servicio amoroso a tus semejantes, pues representa lo que el Padre haría si estuviese en tu lugar. Al final, el propósito de la vida humana es crear un ser parecido a Dios a partir de una criatura material. En la medida que logres esta meta durante tu vida, te estarás acercando a tu verdadero propósito y experimentarás las satisfacciones más profundas en tu alma.
El servicio amoroso a tus semejantes tiene muchos aspectos y no se limita a una profesión o a una tarea específica. Puedes servir a tus semejantes y promover la existencia de un mundo cada vez mejor a través de la manera en que realizas tu trabajo, en el amor que inviertes en la crianza de tus hijos, en la manera en que te comportas dentro de tu grupo y tu civilización, en las ideas que promueves y apoyas, en los líderes que eliges para que extiendan tus ideales a la sociedad. En fin, el servicio a tus semejantes es una meta a la que puedes llegar por diferentes caminos, dependiendo de tus talentos, tus inclinaciones, tus aspiraciones y tu deseo de incorporar cada vez más la voluntad del Padre en tu vida. Como verás, el propósito es el mismo para todos, pero la expresión de este propósito siempre es única, original y personal, sujeta a tu libre voluntad y a tu creatividad.”
© Grupo de Progreso 11:11.
La fe es solamente curiosidad teñida de esperanza — Ajustador del Pensamiento.