Distrito de Illawarra, Australia, 4 de abril de 2015.
Intermedio Secundario Jefe Bzutu (ABC-22).
Tema: “Criterio para la sanación de los enfermos.”
Mensaje recibido por George Barnard.
Bzutu: “Una característica que define casi universalmente a un exitoso sanador a distancia, es la capacidad de ver en su mente a su paciente. ¿Es correcto lo que acabo de decir? No, no lo es. Necesita percibir a su paciente dentro de su alma-mente. Para tener éxito debe llevar consigo su empatía, debe llevar consigo su crecimiento del alma –el valor acumulado con el tiempo, que generalmente no se adquiere de un día para otro– y debe llevar consigo su paciencia y determinación.
“Ciertamente, amigos míos, hay sanadores a distancia que se desempeñan extremadamente bien, pero no pueden ver claramente su propio entorno. Ellos son la excepción, no la regla. Una cantidad mucho más grande de los mejores sanadores a distancia puede ver bien a sus pacientes, lo cual les proporciona una mayor habilidad para sentir empatía, lo que a su vez les trae mayor éxito, una asociación más estrecha con su Espíritu interior, y un valioso crecimiento del alma como resultado. El crecimiento del alma es por lo cual viven en esta roca en el espacio.
“¡OK! ¡Muy bien! Estoy tan contento de que casi puedas completar esta sesión sin tener que levantarte por otro café. Estamos en la lección acerca de la mente-alma haciendo su trabajo, mostrando a tu mente común lo que hay que ver en las lejanas ubicaciones de tus pacientes. En primer lugar, sin embargo, permíteme explicar: tu alma en ciernes es una copia de lo que eres, pero en otra dimensión –la dimensión morontial. Tu alma puede oír, ver y tocar. Incluso puede oler y saborear a distancia.
“No hay ninguna razón para que tú o cualquier persona renuncie a las alertas de sus sentidos al utilizar un bisturí en una ubicación remota. No hay razón para abstenerse de ver, oler o, sí, degustar una muestra de un medicamento o droga que se encuentre alrededor para saber qué consejo específico puedes poner en la mente del paciente. Todo médico desea ser tan exitoso como sea posible, y también tiene el derecho a no ser obstaculizado. Veamos cómo pueden aprender todo esto.
“El criterio mismo para sanar a los enfermos es la imaginación, y no la capacidad, pues todos la tienen. Vuestra imaginación –incluso si es extrema– se agotará. En ese momento se enfrentarán a la realidad. Ustedes verán, oirán, tocarán, olerán y degustarán las cosas muy distantes. Con una guía, serán capaces de usar un bisturí y cortar solo en la profundidad adecuada para eliminar un crecimiento que está matando a un conocido. Si por ahora eso no funciona, imaginen que pueden imaginar que imaginan que funciona.
“Simplemente comiencen por cerrar los ojos e imaginar un círculo. Sigan describiéndolo a sí mismos hasta que se vuelva un poco más claro. Luego tomen un recipiente de un color brillante y un pincel, y pinten vuestro círculo de verde, rojo, azul o cualquier color que les agrade. Cambien su forma y sigan pintando. La realidad de lo que sucede a la distancia surgirá algún día en vuestra mente. Bien puede tomar tiempo, pero este sencillo esfuerzo les pagará dividendos. Sanar vuestro mundo los recompensará con increíbles e inesperadas ganancias espirituales.
“Soy el Intermedio Secundario ABC-22. Les digo Adieu.”
Traducido por Perla Téllez Garza.
© Grupo de Progreso 11:11.
Mi regalo para ti es que tú estés a mi servicio — Cristo Miguel.