Oregón, USA, 19 de Mayo, 2023.
Ajustador del Pensamiento.
Asunto: “¿Qué Salió Mal Posiblemente en el Desierto?”
Mensaje recibido por Anyas.
“A su llegada a Kadesh Barnea, que limitaba con lo Tierra Prometida de Canaán, enviaron doce espías para supervisar la tierra y su gente. Ellos volvieron luego de cuarenta días de exploración. Diez de los espías tenían un mal informe […] Sólo (dos) disentían. Creyendo el reporte de los diez escépticos, la gente se desanimó y se rebeló […], diciendo: “¡Si tan sólo hubiéramos muerto en Egipto! ¡O en este desierto! ¿Por qué el SEÑOR nos trae a esta tierra sólo para dejarnos caer por la espada?” (Extractos de los Números 13 y 14).
Ajustador del Pensamiento: “Luego de ser liberados del cautiverio Egipcio, bajo el sagaz liderazgo de Moisés, quien “fue una extraordinaria combinación de líder militar, organizador social y maestro religioso [LU, 96:5.1], los israelitas casi habían llegado la tierra que Dios había prometido a sus antepasados, una tierra “que mana leche y miel”. Debido a las dudas e incredulidad al informar, el grupo de reconocimiento de cuarenta días, a su gente, Dios prolongó por cuarenta años su peregrinación por el desierto, de modo que la generación incrédula muriera, sin poner un pie en la Tierra Prometida.
El pacto de Dios con Abraham fue a través de Maquiventa Melquizedek. Profetizó la futura ocupación de Canaán por la descendencia de Abraham. “Representa el gran acuerdo Urantiano (la Tierra) entre la Divinidad y la humanidad, por el cual Dios se compromete a hacerlo todo; el hombre sólo acepta creer en las promesas de Dios, y seguir Sus instrucciones.” [LU, 93:6.3-4]
El Antiguo Testamento refiere una situación similar donde se pagó un precio muy alto por mirar atrás al pasado. Ocurrió cuando Lot, el sobrino de Abraham, huyó de la corrupta Ciudad de Sodoma con su familia, para escapar de la destrucción. Su esposa miró atrás y se convirtió en una columna de sal.
El punto que Quiero marcar es que un hijo de Dios con fe no mira hacia atrás, solo hacia adelante. La fe es la puerta de entrada a la tierra prometida interior de florecimiento espiritual, un lugar de infinita esperanza, y logros positivos bajo la divina orientación interior. ¿Por qué le darías la espalda a tan espléndida alianza? ¿No has deambulado lo suficiente? ¡Vuelve a casa donde perteneces! Sigue las directivas de los líderes intrépidos que el Padre te proporciona — como Moisés o Jesús — ¡o conviértete en uno ya que eres guiado por el Espíritu en el interior!”
Traducido por Silvia Adriana Cohane.
© Grupo de Progreso 11:11.
No importa cuál sea la pregunta, la respuesta siempre es El Amor.