Distrito de Illawarra, Australia, 18 de Mayo, 2013.
Maestro Aarón.
Tema: “Un Dios Incondicionalmente Amoroso”.
Recibido por George Barnard.
Aarón: “Sin lugar a dudas, mis queridos jóvenes estudiantes, uno de los más grandes venenos del mundo religioso en el que muchos de ustedes se han criado, es el problema de los persistentes pensamientos acerca de un dios enojado. Entre todos los que enseñan aquí y todos los Maestros del Grupo de Progreso 11:11, ninguno vivía temeroso de las supuestas emociones del Creador tal como lo hice yo, Aarón. Por lo tanto, es lógico que yo deba traerles esta lección acerca del temor y de las dificultades que hay que superar. Toda una vida con una creencia profundamente arraigada en que vuestro Dios es envidioso, es difícil de describir. Tan solo la meditación tiene un largo camino que recorrer para vencer esta errónea creencia.
“La lógica pura debe decirles que el Creador de todo ama a Sus hijos, porque en verdad, de otra manera no estaríamos aquí. Con un poco de atención a lo que vuestros Maestros les han estado diciendo, ustedes sabrían que el amor del Padre es incondicional, y que Él trabaja incansablemente para acercar a Sus hijos hacia Él mismo. Ustedes sabrían que la vida es el mayor de los regalos dados de corazón. Entonces, ¿qué les permite temerle a Dios? ¿Qué hace tan difícil confiar en vuestro Padre-Creador? ¿Qué les impide abrir de golpe esa puerta a la comunicación con el Ajustador?
“Ahora miro hacia atrás a las reglas retrógradas de ‘debo-hacer’ y ‘no-debo-hacer’ de la religión de mi tiempo. Hubo innumerables razones inventadas aleatoriamente de por qué Dios – nuestro Dios – podría perder Sus estribos o volverse celoso de nosotros o de otros dioses. La tenacidad con la que mi temor a Dios se aferró a mi alma, siempre me impidió construir una relación con mi Ajustador. Hoy tengo para una joven amiga la solución simple para sus profundamente arraigados problemas con un padre indiferente y un Dios aparentemente fuera de alcance: meditación y aún más meditación.
“Es importante que te des cuenta de que eres un ser evolutivo, y que las dificultades colocadas en tu camino están ahí para hacerte más fuerte, más maduro para enfrentar mejor las exigencias de la vida. Permite que sea tranquilizante para ti el recordar que tienes todo el tiempo del mundo para hacer tu camino a través de esta vida, y de tus vidas por venir en más altas esferas, para alcanzar la perfección en todo buen momento, sin exceptuar el conocimiento, la paz y la tranquilidad de que Dios es bueno más allá de tu conocimiento, e incondicionalmente amoroso hacia todos.
“Yo soy Aarón, y mi amor hacia ti te dará fuerza. Tus lamentos han sido escuchados. Tu tristeza ha sido notada. Y tu apertura es muy apreciada.”
George: “Gracias Aarón”.
Traducido por Perla Téllez Garza.
© Grupo de Progreso 11:11.
Todos somos uno en nuestra Raíz Espiritual de origen — ABC-22, 1972.