Michigan, EE.UU., 3 de agosto de 2014.
Maestro Ofelius.
Tema: “El proceso de construcción del alma – Parte Uno”.
Recibido por Chris.
Maestro Ofelius: “El mensaje de hoy es acerca del proceso de construcción del alma y los tres procesadores principales –la mente, el corazón y el Ajustador del Pensamiento (en ese orden)–, y cómo estos tres componentes trabajan juntos para alimentar al alma morontial en crecimiento. Al conocer el proceso y cómo trabajan juntos estos procesadores, pueden lograr una mayor efectividad en el crecimiento de vuestra alma al tomar decisiones conscientes y determinar la calidad de vuestras experiencias (‘la materia prima’).
“Primero debemos comprender qué es el alma en realidad. Este, amigos míos, es un tema muy amplio, pero lo definiré brevemente: Puede considerarse que el alma es como un embrión en crecimiento –como un feto– un hijo aún no nacido que está creciendo dentro de ti. Tú eres la madre de este hijo en crecimiento, y por lo tanto, es importante que cuides tu propia salud (tanto mental como física) por las consecuencias que podría sufrir el niño que crece adentro. No fumarías, no beberías alcohol, no tomarías drogas dañinas, ni participarías en actividades peligrosas, pues esto podría afectar negativamente la salud del niño cuando naciera y ocasionar discapacidades en su desarrollo. Por otra parte, amarías a este hijo desde que estuviera en el útero; le hablarías, le leerías, tal vez le cantarías, y le brindarías todo lo necesario para crecer incluso antes de poder abrazarlo, pues este hijo es una parte de ti.
“Darías lo mejor de ti mismo para cuidar a este hijo por nacer, sabiendo que cuando nazca sería completamente dependiente de ti, en todas sus necesidades. Esperando su llegada, prepararías su habitación, encontrarías una cuna cómoda, conseguirías trajecitos y llenarías la habitación con objetos, juguetes y material artístico estimulantes –quizás hasta iniciarías un fondo para su educación universitaria. Estarías planeando para el futuro de la vida de este hijo, y desearías lo mejor en sus experiencias de vida.
“El alma, amigos míos, es totalmente dependiente de ustedes para su desarrollo, y por lo tanto, les sería beneficioso tener mucho cuidado con las decisiones que toman en la vida, tanto grandes como pequeñas. El alma es la mejor parte de quiénes son y en quiénes se están convirtiendo. Por lo tanto, ¡este niño aún no nacido realmente eres tú! Es el ‘tú’ quien retomará y vivirá la vida en la siguiente fase de vuestra carrera ascendente en los mundos mansión de vuestro sistema local. ¿No les gustaría construir el mejor ‘tú’ que pudiera existir, mientras aún están viviendo en este mundo? Tienen ‘todo’ que ver con el desarrollo o con la atrofia de vuestra alma.
“Muchos de ustedes nunca habían pensado en el alma de esta manera, sin embargo, ¡esto es muy importante para vuestro desarrollo futuro, de aquí en adelante! El vientre es vuestra vida actual –vuestro interés, relaciones, actividades, aventuras, pensamientos– todas esas cosas que ‘alimentan’ vuestras experiencias, que se convierten en el ‘paladar’ del apetito del alma. No todos los alimentos en vuestro plato se integrarán al cuerpo del alma, sino solo aquellas experiencias, valores y decisiones morales que sean dignas, que encarnen la Verdad, la Belleza y la Bondad, y que vuestros Ajustadores del Pensamiento (el tercer procesador) consideren que tienen ‘valor de supervivencia’ para convertirse en parte de vuestra alma en crecimiento.
“¿Cómo sabemos qué experiencias y valores cosechará el Ajustador del Pensamiento, y cuáles serán descartadas con la carne? ¿Cómo optimizar el proceso y maximizar nuestro tiempo? Exploraremos esto en la Parte Dos de este mensaje. Hasta entonces, por favor piensen en el cuidado pediátrico de vuestra alma, el ‘tú’ aún no nacido, con qué están alimentando a este hijo y cómo lo están criando.
“Paz para ustedes,
“El Círculo de Siete.”
Traducido por Perla Téllez Garza.
© Grupo de Progreso 11:11.
“El dar de uno mismo, la iluminación de la verdad, y el alivio del sufrimiento
son los caminos más nobles hacia la conciencia superior.” — Maestro Ofelius, 2009.